Tener amigos, más que un gusto, es una necesidad del ser humano. Somos sociales por naturaleza, en mayor o menor medida, pero siempre necesitamos del otro. Todas hemos sentido la necesidad de contarle a alguien la conquista del fin de semana, de salir a comer, de un abrazo, de unas palabras de aliento, de una tertulia llena de risas y de todos esos momentos que pueden compartirse con amigos. Sin embargo, crear lazos de amistad no es tan fácil como suena por muchos motivos; gustos, intereses, y formas de ser no siempre convergen en la misma línea de las personas. Estas diferencias pueden ser tan irrelevantes como detonantes a la hora de sobrellevar  una amistad.

Una tendencia innegable es que las personas tengan de mejores amigos a alguien de su mismo género por cuestión de afinidad, no obstante se dice que por diversas razones los hombres son mejores amigos tanto con sus semejantes como con las mujeres. Y hay una serie de razones que le dan peso a esa teoría:

Sinceridad:

Los hombres suelen ser más directos al decir las cosas y muchas veces eso es lo que necesitamos, cero rodeo y al grano. Ellos suelen ser más honestos y realistas, mientras que las mujeres en su intento de ser más sutiles pueden ser menos sinceras. Con seguridad te dirán lo que debes oír y no lo que quieres oír.

Cero envidia:

La palabra suena fuerte pero es una realidad palpable que vive, en su mayoría, el universo femenino. La envidia se propaga con facilidad en los círculos de mujeres. Belleza, inteligencia, apariencia, capacidad adquisitiva , entre otras, son algunas de las causas de este feo mal.

No critican:

Si hay algo que a los hombres les importa menos es la apariencia y la pinta de sus amigas, podríamos repetir la misma prenda día por medio y ellos no se darían cuenta. A decir verdad nosotras, sin disimular, reparamos de arriba a abajo y en el mejor de los casos criticamos mentalmente si es que otra amiga ya no ha hecho algún comentario. Punto para los hombres.

Conocen su género:

¿Quién más que un hombre puede darnos consejos sombre hombres?, muchas veces necesitamos consejos, opiniones y soluciones cuando estamos saliendo con alguien, las amigas hablan desde  supuestos y los amigos desde el conocimiento.

Confidencialidad:

Hay secretos que si no se los contamos a alguien sentimos que nos ahogamos con él. Ellos suelen ser más prudentes a la hora de guardarlos mientras que las mujeres nos vemos más tentadas a comunicarlos.

Ni todas las mujeres son malas amigas ni todos los hombres buenos, pero sí son características que desmitifican la idea de que personas del sexo opuesto no pueden construir amistades bonitas. Eso sí, si encuentra a un excelente amigo y lo quiere para toda la vida no se involucre sentimentalmente con él porque como dijo el filósofo francés Albert Camus: “La amistad puede convertirse en amor, el amor en amistad…nunca”.